Tarde de julio




En un lento suspiro me pierdo.
Tus manos frías recorren con lentitud el mapa de mi cuerpo,
La suave caricia de tu piel en mi piel nos transporta,
A un mundo de agonía infinita.

Labios que besan sin tocar,
Susurros tiernos al oído,
Montañas surcadas con la lengua,
Picos duros se alzan en el horizonte.

Bocas jadeantes,
Sedientas,
Arden al unísono.

La humedad de mi cuerpo
Te invita,
Con prontitud,
A conquistarla.

Entierro mis uñas en tu espalda,
Corro al encuentro de tus labios,
De uva,
De sal,
De sudor.

Tus dientes se entierran,
En mi cuello,
En mi pecho,
En mi tierra fértil.

Te hundes,
Lentamente en mis aguas,
Somos un solo cuerpo,
Un solo elemento,
Una sola carne.

Juntos,
Ahogados de placer,
Alcanzamos nuestro destino,
Perdidos en un orgasmo.

3 comentarios:

Setho dijo...

:D excelente poema, cocido a temperatura Abi... gracias por compartir, saludos

Lluvia de abril dijo...

Abi, Abi, Abi, me dejás sin palabras mija!
Hermoso como siempre!
Besotes grandotes!

Bel

Flora Isela Chacón dijo...

cuando quien escribe logra que los demás digan "ah, es de Abi" son ya letras mayores, y aquí me pasó con este texto, que grita "soy Abi". Sólo el final me pareció muy crudo, el orgasmo, así sin miramientos rompe con toda la armonía. Bueno, eso digo yo...
felicidades