Con tierra, con aire, con el vacío o con las manos… existen muchas maneras de apagar el fuego. Hay métodos en la vida para todo; para olvidar, para sufrir, para recordar y para apagar el fuego. |
Prefiero
reducir a cenizas el fuego con el tiempo que pasa, que termina por consumirse y
apagarse en la nada. Un fuego alimentado
por memorias que quedaron inconclusas y por promesas que no se cumplieron. Esperando que se queme todo y no quede nada,
aguardo a un lado de la fogata, aventando los besos que me diste, y los que te
faltaron, que se te quedaron atorados. Los te amos que me dijiste, y también
los que no alcanzaste a decirme.
Estoy
alimentando el fuego en vez de apagarlo.
Y lo alimento para que no queden rastros de la colección tan sintética
que me vendiste, que me disfrazaste de autentica y que te compre. Me voy sin prisas, esta vez, de este que creí
que era mi mundo…
Y
alguien lloró… y yo también.
Carlos E. Pacheco
S.
Miércoles 6 de
Agosto de 2006 [08:47 PM]
6 comentarios:
me encantó tu texto!! sólo... el título no mucho, y al final creo que le falta el acento a "lloró" si es que no me equivoco, fuera de eso es Maravilloso! gracias por compartir
Gracias Flora por tus Observaciones.
muy bien Carlos...
me encanta la frase: "Un fuego alimentado por memorias que quedaron inconclusas y por promesas que no se cumplieron." y la idea en general del texto, muy acertado el método de apagado, saludos
Wow!!!
Como siempre Carlos, me ha encantado!
Excelentisimo!
Maravilloso texto Carlos!!!
Gracias!
Besos!!!
Bel
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