49,50,51,52 de 100 sonetos y un suicidio


XLIX

CÁCERES

Cáceres invernal tan calurosa
piedra preciosa del casco urbano,
mantilla de la "Guada" Milagrosa,
motivo pendiente cada verano.

Arco de mi estrella,barrio judío,
ermita de la soledad,allí voy,
plaza conquistada lo tuyo es mío,
virgen del Amparo dime quien soy.

Santísimo Cristo de las batallas,
bálsamo en heridas para canallas
que abrazados lloran en tu cintura,

emigrante madrileño que te sueña
al tesoro de la tierra extremeña,
larga vida ciudad de Extremadura.

L

CINCUENTA DE CIEN

Cincuenta de cien recién cumplidos,
escribir sin saber,triste osadía,
despierto soñé que mis apellidos
brillaban con faltas de ortografía.

Mitad de camino con resoplidos
marcando los ritmos de la poesía,
escrita descuidada de descuidos,
cobarde de textura,pero mía.

Recuerdo lo que espero en cada verso,
esmero cada línea,trasjiverso
arquetipos borrachos de delirio,

mis anémicas musas dan auxilio
al amparo de la obra sin reverso
de estos cincuenta de cien con suicidio.



LI

POR ALGO SERÁ

Para el loco,con infancia.

¿No es aquel el chaval que regalaba
la amistad cultivada en sobrepeso?
la mala vida siempre le mataba
y el muerto resulto salir ileso.

Okupa de mi ser y mis asuntos
tan solo ocúpate de seguir vivo,
sabe más de mí que yo y mi ego juntos,
tarde pago la deuda que te escribo.

Juventud es sinónimo de exceso
tu nariz y mi riñón saben de eso:
turbios lavabos vomitando sangre.

Por algo será pese al calendario,
que a día de hoy seas hoy en mi diario,
devoró el mundo,el muerto de hambre.

LII

LA MEJOR DE MIS POESÍAS

Este no es el soneto de la urgencia
con la rima dictatorial del lagrimeo,
el cansancio fulmina la paciencia
de los labios germinados por deseo.

Esta no es la promesa prometida
ni la voz a ti debida del poema,
más cuesta asimilar la despedida
si la llama que no arde aún te quema.

Este no es el regreso a los infiernos
aceptando el soborno del invierno
mientras arde el verano en noches frías,

mi llanto no será por siempre eterno,
el tachón de tu nombre en mis cuadernos
tal vez sea la mejor de mis poesías.

Rubén Anyolini

1 comentario:

Abi Finch dijo...

Como siempre, muuuuy bueno!